viernes, 25 de febrero de 2011

TOMANDO DECISIONES APROPIADAS EN TIEMPOS DIFÍCILES

PASTOR ANDRÉS FELIPE MACHADO.

ICIE PALABRA VIVA AL MUNDO QUIRIGUA

TEXTO. Mat 4:1-11 “Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo.

Todas las decisiones que tomamos en nuestra vida tendrán repercusiones en el futuro. Si acertamos a tomar la decisión adecuada, seguramente obtendremos buenos resultados que repercutirán hasta la eternidad, pero si por el contrario tomamos una mala decisión, es posible que tengamos que cargar por el resto de nuestra vida con las consecuencias.

Muchos hombres en la biblia tomaron malas decisiones, cuyas consecuencias quedaron consignadas en la Escritura como ejemplo para nosotros. Pueden citarse algunos casos de malas decisiones como el de David al acostarse con Betsabé, el de Sansón al tomar a Dalila por mujer, el de Jonás al no querer predicar en Nínive, el de Pedro al negar al Señor y el del mismo Judas cuando lo entregó. Muchos de nosotros no sabemos como enfrentar los momentos difíciles en los que tenemos que tomar una decisión, sin embargo la Biblia nos da algunas indicaciones al respecto. Esta meditación tomará a Jesús como ejemplo a seguir en relación a la toma de decisiones correctas, específicamente cuando sufrió las tentaciones en el desierto.

I. LO OCURRIDO A JESÚS FUE UNA SITUACIÓN DIFÍCIL.

  • Fue llevado por el Espíritu al desierto. Lo más probable cuando Dios tiene un plan contigo es que tengas que pasar por un desierto. Este sirve como preparación para que puedas superar los desafíos que se te presentarán hacia el futuro. Israel tuvo que pasar por un desierto. El propósito de Satanás era impedir que se cumpliera el plan de Dios para Jesús de ser el salvador de la humanidad.
  • Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre. Todo el tiempo que Jesús estuvo caminando en el desierto estuvo siendo tentado por el diablo. Las circunstancias difíciles prepararon el terreno para la tentación. Era una situación de vulnerabilidad. Todas las decisiones se verán radicalmente afectadas de acuerdo a tu situación y a tus necesidades.

II. LAS DECISIONES TIENEN QUE VER CON LAS COSAS QUE NECESITAS.

  • Jesús enfrentó la tentación a satisfacer las necesidades físicas por un medio ilegítimo. Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan”. Tú te mereces esto o aquello, Dios debe querer eso para ti, es lo que necesitas, pues eres un Hijo de Dios. Toda necesidad física puede ejercer presión sobre tu vida de tal forma que tomes la decisión inadecuada.
  • Tentación a satisfacer sus necesidades de aceptación. El Diablo proponía que si era Hijo de Dios, debía ser reconocido como el Mesías poderoso que el pueblo esperaba. Cualquier acto que reciba la aceptación de las personas pero el rechazo de Dios te llevará a la amargura, fue lo que Pedro sintió cuando negó al Señor por la presión de las personas a su alrededor.
  • Tentación a ejercer poder sin Dios. Los reinos de este mundo están bajo el dominio de Satanás, por tanto no se niega el poder y la maldad que existe en el reino de las tinieblas.

III. JESÚS POSEÍA EL CARÁCTER NECESARIO PARA TOMAR DECISIONES ADECUADAS

  • Antes de ir al desierto fue lleno del Espíritu Santo. No es posible tomar una decisión adecuada en Dios si no se tiene comunión con Él.
  • Todas sus respuestas a Satanás estaban respaldadas por la palabra de Dios. Es necesario conocer todo el consejo de Dios para tomar decisiones inspiradas en la Biblia y que estén alineadas con la voluntad de Dios. Si no te alimentas diariamente con la palabra de Dios no tendrás las herramientas apropiadas para enfrentar las batallas diarias de la vida.
  • Jesús amaba al Padre más que a las cosas de este mundo. (1 Jn. 2:15-17). “…Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él”. ¿Que tanto amas a Jesús? Tu respuesta debe ser fruto no sólo de tus labios, sino de tus acciones que lo ratifican.

IV. CONSEJOS PRÁCTICOS PARA TOMAR DECISIONES ADECUADAS.

  • Entra en profunda oración antes de tomar cualquier decisión.
  • No te apoyes en tus sentimientos, sino en el consejo de la palabra de Dios.
  • Busca a alguien que pueda aconsejarte. Debe ser una persona capacitada que posea una amplia experiencia y conocimiento de la palabra de Dios.
  • Ten confianza en Dios, pues Él no permitirá que seas tentado más allá de lo que puedas resistir 1 Cor. 10:12-13.
  • Medita en las consecuencias que puede traer tomar cada una de las posibilidades que se te presentan.

Si haz tomado malas decisiones que han afectado tu vida, es momento de orar pidiendo a Dios perdón por lo que hiciste, confiando en su gracia y amor infinito. Si tienes esta actitud, seguramente Dios perdonará todos tus pecados, no tengas temor, aprende de lo que viviste y sigue adelante, el no te dejará ni te abandonará.

Dios te bendiga.

Pastor Andrés Felipe Machado.